Representantes de la Asociación de Mujeres Agroextractivistas del Médio Juruá participan en congresos científicos en Río de Janeiro y en Santa Marta, Colombia.
Por Nathalia Messina e Camila Duarte Ritter
Traduzido por Fernanda Luisa Diel
El Instituto Juruá sigue un camino especial, uniendo conocimientos tradicionales con los saberes de la ciencia. Un grupo de investigación centrado en Género y Cadenas de Valor de la Sociobiodiversidad, registrado en el Consejo Nacional para el Desarrollo Científico y Tecnológico (CNPq) como una línea de investigación de la Socioecología Amazónica, es una de las iniciativas que promueve esta integración.
El grupo se ha reunido desde las actividades del Diagnóstico de Género y Juventud en el Medio Juruá, realizado en 2022 por solicitud de la ASMAMJ – Asociación de Mujeres Agroextractivistas del Medio Juruá. Desde los productos científicos hasta los comentarios en las comunidades y entre las instituciones, se sintió la necesidad de consolidar un grupo más fuerte y diversificado, que pudiera contar con agentes sociales de diferentes territorios amazónicos, compuesto por mujeres investigadoras, técnicas y agroextractivistas. El grupo se enfoca en discusiones relacionadas con la participación de las mujeres en las economías de la selva y también en la producción científica de los datos generados.
Así, en el mes de noviembre de este año, tuvimos la oportunidad de ampliar la protagonismo de las mujeres de las poblaciones tradicionales en el ámbito de la investigación científica, con su participación activa en dos congresos científicos de América Latina: el Congreso Brasileño de Agroecología (CBA), que tuvo lugar en su 12ª edición en Río de Janeiro, entre el 20 y el 23 de noviembre; y el Ciclo de Diálogo de Saberes sobre el Manejo Participativo de la Pesca en la Amazonía en el CIMFAUNA en la ciudad de Santa Marta, Colombia, entre el 19 y el 24 de noviembre.
XII Congreso Brasileño de Agroecologia (CBA)
El Congreso Brasileño de Agroecologia, realizado por la ABA – Asociación Brasileña de Agroecología – y varios colaboradores, en el sitio histórico de la Lapa, Río de Janeiro, contó con un público de ‘más de 10 mil personas (..), entre 5,5 mil inscritas y el público de las actividades abiertas. Hubo agroecología en plazas, centros culturales y universidades públicas.’, según relata la propia LA ABA, en sus redes sociales.
La presidenta de la ASMAMJ, Rosangela Cunha, estuvo presente, junto con la analista socioambiental del Instituto Juruá, Nathália Messina, y la analista socioambiental del Memorial Chico Mendes, Jessica Pereira, en una caravana apoyada por el SEBRAE Amazonas con 26 participantes de la Rede Maniva de Agroecologia (REMA). También colaboraron con la comitiva de mujeres del Médio Juruá: el Instituto Juruá y el Servicio Florestal de los Estados Unidos.
Las mujeres agroextractivistas presentaron dos trabajos a partir de los resúmenes extendidos presentados, siendo Rosangela Cunha la primera autora de ambos artículos y las demás integrantes del grupo de investigación mencionado anteriormente coautoras. En el eje temático «Género, Feminismos y Diversidad«, la presentación incluyó un estudio de caso sobre las mujeres del Territorio Médio Juruá en las principales cadenas de sociobiodiversidad desarrolladas en Carauari, Amazonas. El segundo trabajo, en el eje «Juventudes y Agroecología«, abordó el legado agroextrativista en la Amazonía, analizando potencialidades y desafíos para la inserción de la juventud en las cadenas de valor de la sociobiodiversidad.
Además, se presentaron otras dos importantes contribuciones en el Tapiris de Saberes del CBA. Un informe técnico sobre la certificación orgánica del pirarucu, una iniciativa conjunta del Coletivo do Pirarucu y la Rede Maniva de Agroecologia (REMA), y la experiencia de la Asociación de Moradores Agroextractivistas del Baixo Médio Juruá (AMAB) en el manejo del pirarucu, presentada por la presidenta de la AMAB, Fernanda Moraes, con una mirada al papel de la mujer en la cadena productiva.
Paralelamente a las presentaciones científicas, la ASMAMJ también estuvo presente en la Feria Nacional Saberes y Sabores y Economía Solidaria, durante el CBA. En este espacio, las mujeres comercializaron aceites de andiroba, compartiendo los puestos con el pirarucu de manejo de la ASPROC – Asociación de Productores Rurales de Carauari – y Gosto da Amazônia y otros miembros de la REMA y la OPAC Maniva (Organismo Participativo de Evaluación de la Conformidad Orgánica), ampliando las oportunidades de visibilidad y reconocimiento de las comunidades amazónicas.
La presidenta de la ASMAMJ, joven, mujer, ribereña, residente de la comunidad São Raimundo de la RESEX Médio Juruá, Rosangela Cunha, enfatiza la importancia de estos eventos como espacios para el intercambio de experiencias, visibilidad y reconocimiento, y destaca la lucha de las mujeres y los jóvenes:
Ciclo de Diálogo de Saberes sobre el Manejo Participativo de la Pesca en la Amazonía en el CIMFAUNA
En la misma semana de noviembre, mientras el CBA se llevaba a cabo en Río de Janeiro, la ASMAMJ y el Instituto Juruá también estuvieron presentes en el Congreso Internacional de Manejo de Fauna Silvestre de la Amazonía y América Latina (CIMFAUNA), invitados por la WCS Brasil (Wildlife Conservation Society) en Santa Marta, Colombia.
Representadas por Evaneide Costa (Preta) e Irlene Figueiredo (Moça), la ASMAMJ participó activamente en el primer encuentro del Ciclo de Diálogo de Saberes sobre el Manejo Participativo de la Pesca en la Amazonía, compartiendo experiencias con representantes de diversas organizaciones y comunidades. La participación de la ASMAMJ contó con el apoyo técnico de Camila Duarte Ritter, investigadora del Instituto Juruá. Esta iniciativa fue realizada por Aliança Águas Amazônicas e WCS, en el marco del CIMFAUNA XV, que, a su vez, es organizado por la Comunidade de Manejo de Fauna Silvestre na América Latina.
El evento estuvo vinculado al Eje Temático del Congreso titulado “Experiencias de comunidades locales en el manejo de la fauna silvestre”, abarcando temas como sistemas culturales y cosmovisiones, monitoreo comunitario, uso sostenible, bienestar humano y propuestas de manejo comunitario.
Este primer encuentro del Ciclo de Diálogo de Saberes se basó en las experiencias de la Red Ciencia Ciudadana para la Amazônia entre 2017 y 2020. Participaron en el encuentro 19 personas, representando a 13 organizaciones, incluyendo representantes de cinco grupos de manejo de las subcuencas del Amazonas (Perú), Napo y Putumayo-Içá (Ecuador), Juruá, Madeira, Purus y Médio e Baixo Amazonas (Brasil). Destacaron representantes de los pueblos indígenas de la nacionalidad Kichwa (Ecuador), del pueblo de las aguas Paumari (Amazonas, Brasil) y del pueblo Yagua (Perú), así como representantes de pueblos extractivistas y ribereños, y 12 profesionales de organizaciones de la sociedad civil. En total, 11 mujeres y 8 hombres estuvieron presentes en el evento.
El encuentro buscó el intercambio de experiencias, desafíos y buenas prácticas entre los y las gestores de las diferentes subcuencas. Temas comunes como manejo pesquero, conservación, políticas públicas, género y cambio climático fueron discutidos por el grupo y presentados en dos momentos distintos durante el CIMFAUNA XV.
Por parte de la ASMAMJ, Evaneide e Irlene presentaron sus realidades, la organización social y la lucha de las mujeres en el Médio Juruá para el reconocimiento de sus trabajos.
Además, Irlene presentó el tema de género en el manejo pesquero y Evaneide abordó el tema de Cambio Climático y sus impactos en el interior de la Amazonía.
«Me sentí muy feliz, porque vi que, a pesar de la distancia, todos hablaban de lo mismo y que personas de muchos lugares tenían interés en lo que hacemos en nuestra región.» (Evaneide)
Ambos los congresos refuerzan el compromiso del Instituto Juruá en promover la diversidad de saberes y valorizar a las comunidades ribereñas e indígenas como movilizadoras de una ciencia que busca soluciones prácticas y propositivas, desde una perspectiva interna hacia el exterior. Esto respalda lo que dice el texto de la Carta Carioca (documento político leído en el cierre del CBA), que la “expresión de la ciencia del pueblo” debe fortalecerse como una ciencia comprometida, capaz de transformar estructuras opresoras y generadoras de problemas en la sociedad.